
Bertrand quiere que su nueva esposa, Hélène, a adoptar su estilo de vida de balanceo. Él logra esto dejándola frustrada mientras sus siervos spike sus vasos de leche con afrodisíacos mientras él se va a asistir a las orgías en otra mansión. Como resultado Hélène tiene que acabar con la criada, el novio y el mayordomo, a veces visto por su marido, hasta que finalmente se consuma su matrimonio a sí mismo y luego la lleva a lo largo de la orgía, en la que participa con entusiasmo.